sábado, 2 de mayo de 2015

"El Trabajo De Vivir"

 
   Los sociólogos opinan, y doy fe, que cuando realizamos una tarea que nos deleita, la barrera entre obligación y tiempo libre desaparece pero, se puede terminar pensando que nada nos complace más que realizar tal o cual actividad si esa actividad nos tiene en su poder cuando debiera ser ella la que esté en nuestras manos. He visto a muchos alardear con "el síndrome de la agenda completa" pero abrí los ojos -no mucho- y ya pude verlos aferrados a la querida agenda  en el preciso instante de perder al amor de sus vidas junto a las mejores oportunidades de crecer personalmente. Sus citas seguirán puntuales pero Ellos a la deriva porque quien carece de tiempo propio es mucho más que un indigente: es un desheredado total. Yo diría, recordando a Shopenhauer que "un hombre sin tiempo propio es la imagen de la muerte". (Con todo gusto cambio "tiempo" por "dinero").
   Que el ser humano ha trabajado siempre no es una novedad. Primero para subsistir y, más tarde, para ser "alguien" lo cual comenzó a ser problemático para los empleadores de todas las épocas. Éstos buscaron siempre "mano de obra" no mentes claras ni seres radiantes y en el siglo dieciocho, cuando fue tan serio el peligro de que "Alguien" se instalara para siempre, fue una genialidad rebautizarlo como "trabajador" para presentarlo como el perfil ideal que debía mostrar todo infeliz que se ufanara de serlo. A los nuevos esclavos se les implantó la noción de que ser un "trabajador" era un destino de gloria cuando, en realidad, era casi equivalente al de los bueyes.Tanto éxito tuvo esta campaña de degradación humana que en poco tiempo ser obrero significó, para ellos, ser "buena gente" y los victimarios ya pudieron quedarse tranquilos porque, con esa tramoya, a los pobres se los compensó psicológicamente por los sacrificios sobrehumanos que se les exigía en nombre de la revolución industrial. Pasados los años, el sufriente "honrado" fue recuperando su cabeza y hoy está casi totalmente reivindicado pero, en su fuero interno no ha ocurrido lo mismo y por eso, en el inconsciente de las masas, sigue arraigada la costumbre de  vivir para trabajar y morir trabajando, junto a una imagen absurda todavía bien sostenida por intereses que no sé si son sólo políticos: únicamente un obrero es un trabajador. Muchas madres sueñan para sus hijas un marido que "sobre todo sea trabajador". Que las ame, las cuide y sea buena persona,  es lo de menos  y no son pocos los imbéciles que cuando intentan un elogio al honrado le adjudican la dudosa virtud de ser una persona "de trabajo" (o asalariada) sin pensar, por ejemplo, que un violador taxista es un "trabajador" y un inspector municipal coimero también lo es. Por otra parte, la descalificación más frecuente consiste en acusar a alguien de no trabajar aunque por infeliz no pueda conseguir empleo o, por muy dichoso, ocupe sus días desarrollando tareas creativas de ésas  que los pobres queridos amigos "honrados" debieron olvidar. ¿Qué será lo de ser pobre pero honrado? ¿Y lo de tener más plata que los ladrones?.
   Conseguir empleo es el objetivo principal de la mayoría de las personas en edad de comenzar a llevar una vida "independiente" y lo de ser feliz va quedando para más adelante. Las metas personales suelen estar totalmente subordinadas al trabajo de encontrar empleo primero y al de soportarlo después. Cuando se me pregunta  cómo es posible vivir sin trabajar es porque se confunde vida con supervivencia.  Es imprescindible sobrevivir  ¡pero con la cláusula irrestricta de poder también vivir!. Trabajar subordinados como bestias nos puede proporcionar confort, probablemente poder y, en una de ésas, fama pero felicidad jamás porque ella no sabe respirar fuera de su aire que es el de nuestra Libertad. Estar vivo es ser dueño de un secreto personal hecho a la medida de cada uno y demasiado importante como para llevarlo con nosotros a la empresa en la cual trabajamos donde, por lo demás,  casi nunca estamos o estamos siempre a medias porque el trabajo que nos interesa es el de estar presentes en esta vida con todas las de la Ley. 
   Por suerte, a medida que la gente evoluciona se va imponiendo en todo el mundo la autogestión es decir, el trabajo generado por una meta personal o una vocación y uno no puede menos que festejar la tendencia de que mañana mismo lo importante será lo pequeño. ¿Qué empresas son hoy las más relevantes fuentes de trabajo?: causalmente las más pequeñas; las que en un futuro muy próximo darán cuenta de la importancia de vivir y de trabajar como humanos laboriosos que somos. Mientras tanto, cuando los libros quedan intocados por falta de mente fresca para leer, cuando el único tiempo que le dejan a una persona es el necesario para dormir, cuando alguien hace alarde de no tener tiempo para ocuparse de su estado salud, cuando un conocido nos cuenta que le va estupendamente porque tiene dos empleos... nos parece ver a este mundo arrasado por la anti-inteligencia que, en oleadas de partículas invisibles, nos está secando por dentro aunque por fuera  nos deje más o menos presentables para los festejos del 1° de Mayo que es un gran día para los trabajadores de todo el mundo lástima que, detrás de ellos, todavía se esconde la explotación, el hambre, la esclavitud, la injusticia... porque lo de trabajo digno -muchas veces- no es más que un cuentito.